El corazón del patín sanjuanino volvió a latir fuerte este fin de semana. Alexander Ramírez López, o simplemente “Alito” como todos lo conocen, regresó a la competencia nacional tras haber estado entre la vida y la muerte hace apenas cinco meses. Fue durante la Segunda Fecha de la Liga Nacional de Clubes, en el patinódromo Domingo Martínez, donde el deportista del equipo de la Municipalidad de Pocito volvió a calzarse los patines y enfrentarse a los mejores del país.
🩺 Una historia de superación tras el horror
El 15 de marzo, en la salida de un boliche, Alexander fue víctima de un brutal ataque que lo dejó inconsciente. Sufrió hundimiento de cráneo y fue sometido a una cirugía de más de tres horas. Pasó días críticos en terapia intensiva, y su entorno vivió semanas de angustia e incertidumbre. La posibilidad de volver al patinaje parecía, en ese momento, lejana y casi imposible.
Pero la voluntad de vivir, el amor por el deporte y el acompañamiento de su familia, amigos y entrenadora fueron más fuertes.
🛼 El regreso: mucho más que una carrera
Con esfuerzo silencioso y perseverancia, Alexander comenzó a entrenarse nuevamente. Primero probó en una prueba provincial, y luego se puso un objetivo mayor: volver a la Liga Nacional de Clubes.
Y lo logró. Compitió en Mayores Varones, la máxima categoría, y terminó 15°, en una actuación que va mucho más allá de lo deportivo. “El logro más importante fue volver a competir”, expresó emocionado “Alito” en diálogo con Zonda Digital.
“Se notó la diferencia con el resto por la inactividad, pero lo más importante era estar de nuevo en la pista. Mis rivales me felicitaron y me alentaron mucho, fue muy especial”, agregó el patinador, varias veces convocado a la Selección Argentina.
🙌 Un milagro sobre ruedas
Su entrenadora, Verónica Domínguez, lo resumió en una sola palabra: “milagro”. Y es que ver a Alexander competir nuevamente fue un momento conmovedor, no solo para su equipo, sino para todo el ambiente del patín nacional.
En una de las carreras, el miedo a una nueva caída lo hizo autoeliminarse instintivamente. “Vi que varios se cayeron adelante, y me fui al centro de la pista para evitar el choque. Fue por precaución, todavía estoy procesando todo lo que pasó”, relató con honestidad.
🙏 “Dios me dejó varias enseñanzas”
A pesar del calvario vivido, Alexander rescata un mensaje positivo: “Dios me dejó varias enseñanzas con lo que me sucedió”. La frase resume la resiliencia y madurez de un joven deportista que decidió no rendirse y que, tras rozar la muerte, eligió seguir patinando, seguir soñando y seguir viviendo.
Fuente: Diario El Zonda
